'El día' [Parte 1] Cap. 2O

Desde mi habitación se escuchaba la melodía de la canción que tocaba Edward…Pero claro, desde mi habitación se podía oír todo: Seguía sin mi puerta.
Terminé de llorar en mi cama, me limpié las lágrimas con el dorso de mi mano. Después fui a mi reproductor y le puse play, comenzó una canción muy alegre…la cambié, luego el Cd empezó a tartamudear.
-Maldito cacharro estúpido. - refunfuñe dándole un golpe al reproductor
Gruñí enfadada, abrí la tapa y saque el CD, lo tiré al suelo. Busqué otro Cd en el mueve que estaba al lado del hueco de mi puerta, Agarre el primero que encontré y lo puse, cerré la tapa del equipo con un manotazo y el pestillo se quejó. Empezó un solo de guitarra y lo dejé
Suspiré, me puse a pensar en mañana y me puse nerviosa…en realidad no había razón para el nerviosismo, pero yo nunca había salido con un humano.
Me encogí de hombros y empecé a cantar junto con el CD. Me dirigí hacia un mueble donde guardaba…Comida de emergencia y me puse a comer unas galletitas dulces.
Me quedé dormida en cuestión de segundos, atravesada en la cama, con un envoltorio vacio de comida aferrado en mi mano.
Mi sueño era raro, no veía nada, ni oía…pero sentía frio, pero yo sabía que aún seguía dormida. de pronto surgía una luz de la nada que se me acercaba sola. Mi padre y mi madre estaban al lado de la luz. Movían sus labios y sus manos, Me estaban explicando que era la luz. Pero yo no podía escucharlos, intenté decírselo…Pero en vez de mi voz salía un gruñido.
Yo desesperada movía mis brazos y gruñía. Después de unos segundos mis padres desaparecieron junto con la luz, y me sumí en una oscuridad aterradora. Corría pero no iba a ningún lado, pues no se veía nada.
Me desperté jadeando y llena de un sudor frío. Miré el reloj que marcaba las dos de la tarde
-Las dos de la tarde! - grité y me levante de un salto. Mala idea, empecé a tambalearme pero me recupere agarrándome del tocador. Mi estomago se quejó de hambre, Le sonreí.
Bajé las escaleras de dos en dos hacia el frigorífico, Pero vi a mi padre sentado en la gran mesa del comedor almorzando un gran plato de spaguettis con salsa.
Me miró y sonrió con la boca repleta de comida, yo largué una sonora carcajada.
-Quieres - farfulló masticando su pasta.
- No, me haré otra cosa yo misma - dije mientras miraba un paquete de spaguettis para microondas y el me sonrió a modo de disculpa.
Busqué todo lo necesario para hacer unas milanesas y cuando estaba a punto de iniciar mi padre me puso una mano en mi hombro.
- No es muy tarde para que cocines? - dijo señalando con la cabeza el gran reloj plateado de la pared - cuando termines serán las seis de la tarde.
-Necesito estar un poco ocupada - sonreí y luego lo miré con reproche - y que tu cocines a la velocidad de un caracol no significa que los demás cocinen lento. -le saqué la lengua y comencé a cocinar. - además pienso pedirle a alguien que me acompañe a cazar - dije en susurros y bajando la mirada.
- Tranquila, todo marchará como la seda en la noche - me dijo, me dio un abrazo y se fue escaleras arriba.
Comí con deliberada lentitud mientras mi familia pasaba por la cocina me daban algunas palabras de ánimo…para la noche.
- Sabes que necesitas Kiarita? - me preguntó Alice cuando yo comía mi último bocado.
- No Alice…que necesito? - le pregunté dubitativa, no sabía que quería decir.