'Luego lo sabras' Cap. 11

Caminamos juntas hasta adentrarnos un poco en el bosque. Yo le señalé a Esme que se alejara unos metros, por su seguridad.
Busqué un fuego en mi interior, intenté extenderlo por cada punta de mi cuerpo, Fallé. Eso me pareció muy extraño. Volví a intentarlo con más fuerza, ahora funcionó sin vacilación y exploté.
Esme había traído unas ropas para después de que me transformara. Ella me miro maravillada, como si fuera por arte de magia me hubiera convertido de una frágil humana a un formidable lobo, en realidad loba.
Me acerque a Esme a trote lento y agaché mi cabeza lobuna, la miré fijamente y ella me sonrió y alargó su brazo para acariciar mi pelaje.
Me acarició despacio y suave, como si en cualquier momento fuera a destrozarme en pequeños pedacitos. Yo sonreí, con mi extraña sonrisa lobuna, yo había visto sonreír a mi padre en forma de lobo, y yo encontraba esa imagen muy divertida.
- Eres muy bonita de las dos formas - comentó Esme, siguiendo tocando mi cuelo y mi hocico,
Yo era color marrón chocolate claro, Según Carlisle era muy interesante que yo pudiera transformarme, una vez él me preguntó si yo me sentía mal a estar junto a los vampiros, yo solo dije que era raro su olor, pero no desagradable. Carlisle comentó que yo también olía raro. Sonreí a aquel recuerdo. En realidad ya estaba acostumbrada a su raro olor, así que no me molestaba en lo más mínimo
- Muy bonita, de verdad - Repitió alejándose un poco de mí y mirándome desde otro ángulo.
Me dejó la ropa encima de mi lomo, me alejé de ella y me adentre un poco más entre los arboles, revertí la fase y me vestí. Yo tenía mucha vergüenza a que me vieran desnuda, yo aún no superaba esa parte de ser un Licántropo.
Esme me dijo que los demás llegarían de caza en unos dos días.
Pasaron tres días y ellos no llegaban, yo me ponía ansiosa y preocupada, a la noche llegaron todos. Nos quedamos hablando hasta que a mí me vinieron unas terribles y sorpresivas ganas de irme a dormir.
Esa noche había dormido sin sueños, igual que los otras dos. Me levanté por un sorpresivo calor abrasador que me inquietaba. Me senté de repente y mi madre me miraba desde la mecedora con una muy dulce sonrisa, Le correspondí la sonrisa y entrecerré los ojos.
- Qué pasa mamá? - Le pregunté mientras ella se levantaba y se sentaba en mi cama.
- Nada, te miraba dormir. Como estas? - Me froto la frente con suavidad
- Bien, está muy soleado - dije mientras miraba hacia la ventana
- Tu tienes suerte, puedes salir como si fuera un día normal - acentuó su sonrisa - Tienes un brillo precioso en la piel, pero no llama la atención como yo o como Rosalie.
Mi madre se levantó y abrió la ventana, ella resplandecía con un brillo raro pero bonito, un poco menos que el de los vampiros normales. Yo solo resplandecía como si tuviera crema del cuerpo con glitters, eso me gustaba…mi piel, era muy bonita al sol.
- Tú si puedes salir - le repuse
- Si, pero… es algo raro que una persona brille, no? - Rió melódicamente y yo también lo hice, luego sonrió y le correspondí la sonrisa, me levanté de la cama, buscando mis zapatillas.
- Hace mucho que te levantaste - Le pregunté a mi madre. Pues ella, al igual que yo, si podía dormir.
- Dos horas mas o menos.
- Oh, y no te aburres de verme a mí - le pregunte, ella sonrió y negó con la cabeza
- Quieres que te haga algo de comer? - me preguntó mientras se dirigía hacia el hueco de mi puerta, que seguía desaparecida.
- Seguro - dije mientras me calzaba mis zapatillas.
- Que querrías? - me preguntó dándose vuelta en el umbral de la puerta.
- No lo se, que hay? - Miré a la ventana, de nuevo maravillada, estaba muy soleado… Creó que si lo dejaba de admirar… se escondería, Sonreí ante aquel pensamiento
Me levanté y bajé las escaleras, ella fue detrás de mí. Me pasó y fue hacia el frigorífico
- Quieres huevos revueltos? - me pregunto mientras agarraba una cajita azul.
- Claro - miré hacia todos lados y vi que la casa estaba vacía - y los demás, mamá?
- Tu padre fue a ver a Billy, Tus abuelos junto con Carlisle y Esme están… con Charlie - se le hizo un nudo en la garganta, hasta yo lo pude sentir.
Yo no quería que mi madre sufriera, Pensé en el don de Jasper y dejé que la atmósfera se inundara de una tranquilidad, que el sufrimiento y las tristeza evacuara la habitación
- Está bien Charlie? - Pregunté. Viendo que mi madre se rehusaba a la tranquilidad, pero no la podía evitar.
- Si, te prometió que mejorará - Sonrió a regañadientes y siguió contestándome - Jasper, Alice Emmett y Rosalie fueron a ver unos asuntos.
- Puedo saber que asuntos? - Traté que mi madre no pensara en cosas que la hicieran sentir mal.
- Humm, Luego lo sabrás - Sonrió y comenzó a cocinar los huevos, un aroma hogareño comenzó a sentirse en la habitación y mi estomago se quejó
Le di vueltas a lo que había dicho, eso sonó.. humm.. Misterioso?

Espero que els guste!

Love&Peace♥